viernes, 20 de octubre de 2006

La (mala) educación

Hay dos formas de interactuar con el resto de las personas: con educación o sin ella. Y no hay más.

Lo digo porque yo, cuando estoy aburrido, me planteo retos absurdos y ridículos que nadie entiende, salvo yo, que al fin y al cabo es lo que me importa. Por ejemplo: esta mañana en el autobús. Me siento al lado de un chaval. Saco mi libro y me pongo a leer. Al rato, se acerca una parada y compruebo, por los preparativos previos, que el chaval va a salir en ella. Yo estoy sentado al lado del pasillo, así que es necesario que me levante para dejarle pasar. En los segundos que quedan para el desenlace de la situación, invento mi reto del día: no le dejaré pasar si no me lo pide por favor. Es más: no le dejaré pasar si no me habla.

¿Qué extraño hábito nos ha convertido en animales que van en camiones de matadero directamente hacia el despiece?

Así que ahí estaba yo, con mi libro abierto por la página 299, en plena escena de tensión, y con un tipo a mi lado, semiincorporado en su asiento, esperando que salga, encabronado ya... pero eso sí, sin despegar los labios.

Muy bien, pues ahí te quedas. El autobús para y el chaval, que está muy nervioso porque ve que no le da tiempo, me empuja levemente con sus piernas. Entonces levanto ligeramente la vista y hago un gesto con la cabeza, en plan: "Qué". Y entonces compruebo que no es mudo, ni sordo, sino sólo antipático:

- Que me dejes salir -dice, con esa voz que sólo tienen los estúpidos.

- Querrás decir por favor -digo, las puertas a punto de cerrarse.

- Por favor.

Sólo la seguridad de que una discusión le hará llegar tarde al trabajo hace que diga las dos palabras mágicas y provoque mi reacción inmediata. Yo me levanto, él tiene libre la salida, las palabras mágicas han surtido su efecto.

Mañana enseñaré a otro antipático a que el resto de los mortales estamos deseando escuchar su estúpida voz.

21 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajajajaj
Justo le contaba a un amigo hoy que me presentaron(por cuarta vez) a un personajillo (de esos famosos) y el muy ### me dijo ¿te cononozco? a lo que respondí ¿Yo te conozco a tí?

Me uno al clan...educación para todos!!!

Está dicho

3'14 dijo...

Me ha encantado. Eso del reto del día está bien. A mí me sucede que, en la cola de la carnicería, o del super, etc... siempre otorgo el beneficio de la duda a esas mujeres en avanzada edad, o llamadas literalmente "viejas", que por tener más edad, se creen con el derecho de colarse ante todo el mundo, avanzado posiciones sin el menor disimulo para colocarse las primeras... Es cuando, segundos antes a su hábil intención, yo les espeto un seco: Perdone, pero me toca a mí. Si quería pasar antes, haberlo preguntado (a veces aún con prisas les cedo el paso cuando se de sobras que no tienen otra cosa que hacer que dejar pasar su tiempo...) Pero me fastidia ese supuesto derecho que se adjudican a pasar por encima de todos los demás y con total nulidad de educación.

Fernando J. López dijo...

Tienes mi aplauso de docente desesperado, a ratos, con la no-educación que nos rodea...
Tan difícil es mirar a los demás como personas y no como pedazos de carne que caminan? No sé, tal vez sea culpa de que como vamos cargados de cables, baterías y cargadores nos acercamos cada día más a la fisonomía del androide, a lo Blade Runner.
A ver cuándo inventan un mp3 que diga por favor y gracias en lugar de sus dueños... seguro que funciona mejor
Besos corteses ;-)

Kiki Deluxe dijo...

Yo he tenido algún problema en el bus por culpa de ese entrañable a la par que odioso colectivo de los viejos.
¿Es de mala educación no cederle el asiento a un viejo en el autobús, cuando tu que estas tan tranquilamente sentada no te levantas porque te has hecho un esguince y tienes el tobillo como un botijo y te duele estar de pie? Pues debe serlo, porque el otro día me gané unas cuantas miradas de odio por parte de los viajeros y algunos comentarios de "estos jóvenes qúe maleducados son". Tampoco te puedes quejar cuando un viejo te empuja por la calle porque es OBVIO que la culpa es del joven. En fin, te apoyo en tu cruzada contra la mala educación!

Sr_Skyzos dijo...

Estoy con Mari. Hay gente que te presentan en fiestas de amigos y que, cuando te la cruzas, saludas por educación. Más de una vez a mi pareja o a mí, nos ha/n dejado con el saludo en la boca y hace/n como que no nos ven. Estamos pensando en lanzarle/s besos y sacarle/s la lengua en plan lascivo; por si reacciona, para decirle/s "¡Ah!, ¿éso sí lo ves pero el saludo de antes no?"

Anónimo dijo...

..yo, que un día pasaba por aquí, hoy repito.. y me siento indentificada con tu reto del día...

sólo que yo lo hago por ser mala.. porque en general llego alas últimas paradas dormida (que para algo tengo 40 min de autobús...) y a veces, juego a ver cómo me despierta el de al lado para dejarle salir.. =)

buen día...

SisterBoy dijo...

Estoy de acuerdo con abad, hay reglas que se establecen sin tener que decir una palabra, por ejemplo la regla no escrita (ni dicha) de que cuando hay dos persona en el ascensor deben colocarse lo más lejos posible la una de la otra.

Y esto lo dice alguien que al entrar en la guagua siempre le da los buenos dias al chofer incluso cuando tiene puesta Cadena Dial.

Anónimo dijo...

Que fuerte me parece que le hagas suplicar a la gente por una cosa sería tu obligación (o mejor dicho tu buena educación) de hacer... Vamos, que tampoco cuesta nada levantarse cuando en una situación así es lo mínimo que se espera. La educación se demuestra de muchas otras maneras :(

- Chise

Manolo dijo...

Si alguna vez se han subido a algún transporte público en mi ciudad, entenderán lo que es educación -a la fuerza-. Debido a la cantidad de personas que viven aquí, los autobuses siempre van como latas de sardinas, pero esto es lo que hace que la gente se comporte, el contacto tan cercano; un ejemplo es cuando te subes por la puerta de atrás, (la salida) y tienes que pagar, esto lo haces dandole el dinero al sujeto que siga y este a su vez se lo da al que sigue, hasta que llega al conductor. Suena a ficción viviendo en esta apocalíptica ciudad, pero creo que jamás he visto que se pierda ni una moneda.


Por cierto; ¿qué tal si el sujeto era mudo?

Me gustó el reto. Lo aplicaré, aunque seguro alguno dirá: "muévete cabrón".

mc clellan dijo...

Le desafiaste. Pero, por desgracia, dudo que sepa dónde querías golpearle. Se habrá bajado del autobús con la sensación de que hay gente muy rara por el mundo. ¡Qué gracia!

Anónimo dijo...

me parece genial que haya genta con "educación", como son: adad de carfax, sisterboy y chise. Que suerte que gente como esta nos haga las cosas más fáciles al resto que no tenemos nada de "educación", por no levantarnos o dejar salir del metro a los buenos educados que no te lo piden, sino que te se limitan a empujar y a tirarse encima para salir por no poder decir un: vas a salir?, simplemente. Enhorabuena chic@s, asi vamos, gente asi es la que se necesita!!! MUCHAS GRACIAS!!!

SisterBoy dijo...

No voy a entrar en discusiones en la secciòn de comentarios del blog de otra persona. Resumiendo opino que poner a un desconocido en una situación incomoda sin ninguna necesidad no me parece ninguna muestra de educación.

Tomás Ortiz dijo...

Tranquilos, chicos, no quería que hubiera ninguna polémica.

Quizás mi forma de actuar no es la correcta, no lo discuto, quizás el más maleducado sea yo, tampoco lo discuto. Quizás es que no domino el protocolo en el transporte público, pero yo siempre he confiado más en la comunicación que en el protocolo, la verdad.

En cualquier caso, a los que no están de acuerdo conmigo, tranquilos: a partir de ahora, cuando estéis sentados a mi lado, os dejaré pasar sin rechistar.

Por cierto:
- Abad, el Metro y bus urbano de Madrid no conoce de protocolos ni de buenos modales para con nadie, es la jungla.

- Chise, si no cuesta nada levantarse, tampoco cuesta nada hablar. Según tú, la educación se muestra de muchas maneras. Tienes toda la razón.

- Sisterboy, es cierto: incomodar a alguien desconocido no es educado. Pero tampoco lo es dar un rodillazo a alguien porque no puedas salir, por muchos motivos protocolarios que tenga.

- Fan, los códigos de conducta (escritos o no) no son ninguna chorrada, nos ayudan a convivir y son la base de la sociedad. Otra cosa es que estemos de acuerdo con ellos o no, pero su utilidad es innegable.

En cualquier caso, chicos, no quiero que haya ningún mal rollo. De verdad. En qué hora se me ocurrió este post...

Saluditos a todos! Haya paz!

3'14 dijo...

Si sirve de algo...
Creo que "discutir" o mejor dicho "dialogar" ante una diversidad de opiniones no debería crear malrollo alguno. Y menos en un espacio así. sería muy aburrido todo si siempre estuvieramos de acuerdo. Creo que es muy positivo y productivo intercambiar formas de ver las cosas.
Prefiero mil veces que sigas colgando este tipo de post, con o sin pretensiones de polémica, pero que ayudan a la reflexión a que tus posts fueran vacíos de contenido.
De todos modos, quiero añadir que tanto las aportaciones de Abad, sisterboy y chise, me parecen totalmente respetuosas, pese a ser contrarias a la mía, las atiendo y puedo comprender su punto de vista. Mientras que el usuario anónimo que ni firma (tampoco lo critico, tiene todo su derecho a mantenerse en el anonimato, pues el autor de este blog así se lo brinda), me hace percibir cierta agresividad en su comentario. Creo que ha tenido que sufrir más de un "atropello" en el transporte público. Pero eso sí, si algo necesitamos son abueletes y abueletas con bastón en mano para irnos dando garrotazos de buena educación ;)
En fin, como no se como dirigirme a ti, ya que no hemos sido presentados, me solidarizo contigo, NO ESTÁS SOL@. Somos tus amigos, ya pasó todo.. tranquil@...

Anónimo dijo...

Me temo ke opino como sisterboy; a veces ( de hecho, siempre) el fin no justifica los medios.

Cristina Crisol dijo...

Educación y un poco de paciencia, no cuesta absolutamente nada. ¿Habrá que ser pacientemente educados?
Mil gracias querido bit por tus gloriosas polémicas educacionales.

Anónimo dijo...

¡Qué bueno! (El post, la discusión, el blog). Yo estoy un poco de los dos lados: creo que hay una etiqueta no escrita que te empuja a levantarte cuando ves que el otro hace ademán de salir, pero también creo que no saber pedir las cosas es falta de educación y civismo. La misma que tienen las petunias que se me cuelan en la pescadería, aquejadas de unas prisas tremendas (porque claro, tienen que volver a casa a acabar de fisionar el átomo y escribir la novela del siglo), sin decir ni palabra. ¡¡La gente tiene alergia a las palabras, ¿o qué?!!

Unknown dijo...

Super de acuerdo con Cayetana Altovoltaje. También el protocolo no escrito del transporte público dice que si la otra persona, la que debe dar paso, no se ha dado cuenta, que aunque interiormente no es el caso exteriormente si es, un ¿Me permite? con un tono que implica "por favor" o un "excuse" son de recibo.

Luego si, al final resulta que por h o por b las cosas hay que pedirlas por favor

Pilar M Clares dijo...

Parece que cada día hay más desprecio por las palabras, por la comunicación primaria, la de los ojos, una sonrisa, un amabilidad. Somos tantos que las relaciones se embrutecen. Yo apuesto también por la cordialidad. ¿Por qué tratarnos con brusquedad? Es magnífico que el vecino te diga buenos días, o que te cedan o cedamos el paso, esas cosas que nutren y hacen que tu disposión para el día sea buena. En el tema de los adolescentes, ya sabes, las hormonas van por delante de ellos, son "animalicos sueltos" jj.
Besicos

Marujita Robinson dijo...

Yo ya he perdido la esperanza en esta raza humana nuestra, el otro día por ejemplo, estaba cenando con unos colegas y cuando me giro hacia uno para decirle una cosa le veo sacándose con las uñas un trozo de carne de entre los dientes...Al final el burrito se lo comió su padre. ¡Más modales, por favor!!!!!!

Anónimo dijo...

A mi me parece muy desagradable toda esa pluralidad de personas que cuando llegan a su destino en el tren, y que da la casualidad que también es tu destino, cogen y se sacan el cigarrillo para encenderlo justo en el momento en el que pulsan el botón de apertura de puertas. Es lo más asqueroso que me puede pasar después de un día de trabajo estresante, con todo el cansancio acumulado. Bastante tengo con la polución que hay de forma innata en el ambiente de la calle, como para ir por ahí tragando malos humos de nadie. Y encima no les puedes decir nada, porque te mandan a la mierda literalmente, y tú te quedas con un careto de atolondrado que quita el hipo. Si eso es educación, yo soy catedrático. Pero vamos, eso es un detallito, luego está esa gente que anda por la calle mirando escaparates, aunque no haya escaparate, sino sólo un muro de contención, y además se van moviendo en zigzag, de forma que es impredecible averiguar cuál va a ser su próximo movimiento, porque lo ves venir, y en el útlimo instante, ¡zas!, se choca contigo, no pide perdón y te mira como si tú tuvieras la culpa. Como dice una amiga mía "me reviene por dentro". :-)